Respuesta:
Antes de Zaratustra, los antiguos persas adoraban a las deidades de la antigua religión Aria de Irán, una contrapartida de la religión que llegaría a ser conocida como hinduismo. Zaratustra condenó esta práctica y predicó que sólo Dios -Ahura Mazda, el Señor de la Sabiduría- debía ser adorado.
Explicación: