Respuesta :
Por qué las palabras son mágicas?
La capacidad creativa del ser humano nos instala en un mundo mágico en el que es posible la interacción, la alegría, el sueño, el juego, la convivencia, a través de la palabra. Y sorprende que esto lo podamos lograr a partir de recursos limitados: vocales y consonantes, cuyas múltiples combinaciones permiten crear espacios infinitos en contextos diversos conectados con la realidad. Esa magia explica el asombro del profesor Ángel Rosenblat, cuando se pregunta: “¿Cómo puede la palabra, un soplo sonoro que se desvanece en el aire transmitir el amor, el odio, la alegría o el dolor?...” Para este estudioso de la lengua es además sorprendente que ese soplo se fije también en papel, pergamino o celuloide y viaje por todas las lejanías y se perpetúe por los siglos en obras como El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha o Doña Bárbara,
para citar sólo dos ejemplos del campo de la literatura en los que se demuestra ampliamente el porqué de la magia de las palabras: con ellas podemos crear mundos fantásticos, derivados de nuestra
imaginación y nuestros conocimientos
La capacidad creativa del ser humano nos instala en un mundo mágico en el que es posible la interacción, la alegría, el sueño, el juego, la convivencia, a través de la palabra. Y sorprende que esto lo podamos lograr a partir de recursos limitados: vocales y consonantes, cuyas múltiples combinaciones permiten crear espacios infinitos en contextos diversos conectados con la realidad. Esa magia explica el asombro del profesor Ángel Rosenblat, cuando se pregunta: “¿Cómo puede la palabra, un soplo sonoro que se desvanece en el aire transmitir el amor, el odio, la alegría o el dolor?...” Para este estudioso de la lengua es además sorprendente que ese soplo se fije también en papel, pergamino o celuloide y viaje por todas las lejanías y se perpetúe por los siglos en obras como El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha o Doña Bárbara,
para citar sólo dos ejemplos del campo de la literatura en los que se demuestra ampliamente el porqué de la magia de las palabras: con ellas podemos crear mundos fantásticos, derivados de nuestra
imaginación y nuestros conocimientos