El fin que persigue el hecho de que todos los objetos punzantes, como alfileres, puntillas, clavos, entre otros... Se caractericen por tener una punta, es que pueda facilitarse que estos objetos pueda penetrar de forma correcta, fácil y precisa la superficie de distintos materiales.
El hecho de poseer una punta, les permite a estos objetos ser mas útiles en las tareas para las que han sido elaborados, como ser clavados o introducidos en superficies sólidas.