Los derechos humanos sirven para conseguir que estos valores se hagan realidad.
Reconocer la existencia de derechos humanos es aceptar que
cualquier persona puede exigir algunas cosas importantes y necesarias
para vivir. Por ejemplo, todos podemos exigir que se respete nuestra
vida, que no se nos maltrate, que se garantice nuestra libertad, que se
nos trate igual que a los demás, que se nos ofrezcan medios para cuidar
de nuestra salud y recibir educación.