Respuesta:
porque las exigencias de su dios celosos y castigador eran una carga para la naturaleza humana y el culto a otros dioses era más lijero y no les exigía la negación de placeres y de la dicha de existir
también el servir a un mismo dios no les satisfacía y el culto a otros podía ser más entretenido que los rituales toscos y sacrificiales del judaísmo