Respuesta :
Me contaron que a los peces no les importa ser pescados, pues tienen la sangre fría y no sienten dolor. Pero no fue un pez el que me lo contó.
El hombre es el único animal que tropieza dos veces sobre la misma piedra.
Cuando hayas cortado el último arbol, contaminado el último rio y pescado el último pez, te darás cuenta de que el dinero no se puede comer.
Los bosques serían demasiado silenciosos si sólo cantaran los pajaros que mejor lo hacen.
La naturaleza es una interpretación transitoria que el hombre ha dado a lo que encuentra frente a sí en su vida. A ésta, pues, como realidad radical -que incluye y preforma todas las demás- somos referidos.
Hay quien cruza el bosque y sólo ve leña para el fuego.
Lo mejor que la naturaleza ha dado al hombre es la brevedad de su vida.
El hombre es el único animal que tropieza dos veces sobre la misma piedra.
Cuando hayas cortado el último arbol, contaminado el último rio y pescado el último pez, te darás cuenta de que el dinero no se puede comer.
Los bosques serían demasiado silenciosos si sólo cantaran los pajaros que mejor lo hacen.
La naturaleza es una interpretación transitoria que el hombre ha dado a lo que encuentra frente a sí en su vida. A ésta, pues, como realidad radical -que incluye y preforma todas las demás- somos referidos.
Hay quien cruza el bosque y sólo ve leña para el fuego.
Lo mejor que la naturaleza ha dado al hombre es la brevedad de su vida.
La naturaleza quiere que la amistad sea auxiliadora de virtudes, mas no compañera de vicios.
La naturaleza no hace nada en vano.
Hay un libro abierto siempre para todos los ojos: la naturaleza.
Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras que el género humano no escucha.
Amigo mío, la Naturaleza ha dado a cada hombre un estilo, como una fisonomía y un carácter. El hombre puede cultivarla, pulirla, mejorarla, pero cambiarla, no.
La naturaleza no hace nada en vano.
Hay un libro abierto siempre para todos los ojos: la naturaleza.
Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras que el género humano no escucha.
Amigo mío, la Naturaleza ha dado a cada hombre un estilo, como una fisonomía y un carácter. El hombre puede cultivarla, pulirla, mejorarla, pero cambiarla, no.