Respuesta :
1.- Nosotros podemos caminar gracias a que entre nuestros zapatos o pies y el suelo se genera fricción, si no sería como caminar sobre hielo, nuestras piernas ejercen una fuerza contra el suelo y el suelo ejerce una fuerza sobre nosotros que nos mueve hacia arriba y adelante según la tercera ley de Newton. Para caminar es importante además equilibrar nuestro peso de manera correcta y ahí interviene la gravedad.
2.- La música de un altavoz o unos audífonos son ondas mecánicas longitudinales que se propagan a través del aire hasta nuestros oídos. Las bocinas y audífonos funcionan gracias al movimiento de electrones que generan campos magnéticos y mueven parte de la bocina para generar las ondas de sonido. La intensidad del sonido depende de la distancia a la que te encuentres de la fuente y de si existen interferencias de algún tipo. Una vez en nuestros oídos las ondas de sonido son convertidas en señales eléctricas y enviadas al cerebro para ser interpretadas como música.
3.- Si usas una regadera el agua cae debido a la gravedad, sale con una determinada presión y en determinada cantidad según como esté la llave y te golpea con determinada fuerza. Además, la temperatura del agua depende de la cantidad de agua fría que se mezcla con agua caliente entre otras cosas. En una bañera además uno experimenta una fuerza boyante equivalente al peso que desplaza según el principio de Arquímedes.
2.- La música de un altavoz o unos audífonos son ondas mecánicas longitudinales que se propagan a través del aire hasta nuestros oídos. Las bocinas y audífonos funcionan gracias al movimiento de electrones que generan campos magnéticos y mueven parte de la bocina para generar las ondas de sonido. La intensidad del sonido depende de la distancia a la que te encuentres de la fuente y de si existen interferencias de algún tipo. Una vez en nuestros oídos las ondas de sonido son convertidas en señales eléctricas y enviadas al cerebro para ser interpretadas como música.
3.- Si usas una regadera el agua cae debido a la gravedad, sale con una determinada presión y en determinada cantidad según como esté la llave y te golpea con determinada fuerza. Además, la temperatura del agua depende de la cantidad de agua fría que se mezcla con agua caliente entre otras cosas. En una bañera además uno experimenta una fuerza boyante equivalente al peso que desplaza según el principio de Arquímedes.