Respuesta :
Siempre se ha escudriñado el cielo para
tratar de adivinar el tiempo que va a hacer. Los campesinos y los
marineros han aprendido en el curso de los siglos a leer en las nubes y
en los vientos si el tiempo será bueno o malo. Hoy confiamos en las
predicciones de meteorólogos profesionales, producto de un esfuerzo
internacional. Hay millares de estaciones meteorológicas en todo el
mundo, tanto en tierra como en el mar, en las que se registran las
condiciones del tiempo por lo menos cuatro veces al día. Se miden
fenómenos tales como la presión y la temperatura del aire, velocidad del
viento, nubosidad y volumen de las precipitaciones. En otros lugares se
efectúan observaciones de capas más altas de la atmósfera por medio de
globos, y hay satélites que envían continuamente datos y fotografías a
la Tierra.
Toda esta información se transmite a las oficinas meteorológicas de cada
país, donde se vierten en mapas y estadísticas que son analizadas por
los meteorólogos. Sus resultados son enviados a los periódicos ya las
emisoras de radio y televisión, desde donde se facilitan las previsiones
al público. En la difusión de datos meteorológicos es fundamental la
velocidad de transmisión, ya que los meteorólogos deben anticipar lo
antes posible la llegada de huracanes y tomados, inundaciones y heladas.