UN VIAJE FRUSTRADO Llevado por el deseo de que se hiciera justicia por la muerte de su amigo y tratando de evitar males peores para Inglaterra, Richard At Lea se dispuso a realizar los preparativos para su viaje a Tierra Santa.Había asuntos importantes que tenía que resolver: conseguir dinero para poder fletar un barco y pagar a los hombres armados que lo acompañarían, y dejar a alguien encargado de la custodia de su hija.At Lea, después de pensar en quién podría ser la persona más idónea, decidió acudir a un amigo a quien hacía tiempo que no veía: Hugo de Reinault.Este noble caballero sajón debía algunos favore