Milé es una niña indígena wayuu que vive feliz con su numerosa familia en una ranchería de La Guajira, entre el mar y el desierto.
El descubrimiento involuntario de un delito, con su secuela de retaliaciones, los obliga a huir como desplazados a una gran ciudad. Allí se apodera de ellos el ‘mordisco de la medianoche’, el hambre y la nostalgia por el hogar perdido.
Con un lenguaje sobrio y una historia de gran suspenso Leal Quevedo atrapa al lector desde las primeras páginas a medida que describe los sufrimientos que atraviesa una familia víctima de la violencia en Colombia y a su vez nos enseña los valores y la riqueza de una gran cultura indígena.