José al que han llamado “Pepe” los compañeros en la escuela, no tanto por su nombre sino por marcarlo como “pepenado” palabra que define, al momentos en la época que se desarrolla la historia, un chico recogido, un huérfano criado por lástima, un sin apellido y tantas cosas más con que la gente entonces y ahora excluye a algunos por su orígen. El pobre “pepe” ha sido abandonado a las puertas de una casa de gente bien, nada menos que el descendiente de un gran general español y su esposa que para su suerte no tienen hijos. La señora le ama y lo cría como a un hijo, el marido y eso sucede mucho lo detesta y se niega siempre a adoptarlo y muerta la esposa lo echará a la calle.
Pepe por algunas tristes cosas del destino entra en relación con un alcohólico exmiembro del ejército viudo y padre de varios hijos que son criados con abnegación por la hija mayor, una chica de la que Pepe se enamorará. Las cosas habrán de complicarse cuando Pepe convertido en miembro de la policía descubre un día que una mujer encerrada en una vieja casa abandonada y un hombre perseguido por la ley, son sus verdaderos padres.
Muchas cosas habrán de pasarle al pobre expósito antes de que la felicidad se encuentre con él. Ya luego será echado del ejército por su orígen, se alejará de la mujer que ama, morirá el padre bandolero y motivo de verguenza, y sucumbirá el huérfano a una fiebre que lo lleva a las puertas de la muerte
