Las soluciones son mezclas físicamente homogéneas de partículas de dos o mas
sustancias, que pueden ser gaseosas, líquidas o sólidas. Pueden existir todas las mezclas
posibles entre los tres estados de la materia. La sustancia que se disuelve se llama soluto
y el medio en que se disuelve se llama solvente o disolvente. Generalmente, las
sustancias que se encuentran en menos cantidad corresponden al soluto y las que se
encuentran en mayor cantidad al solvente. Las clases de soluciones más importantes son
las de sólidos en líquidos, que son las más comunes, las de líquidos en líquidos y las de
gases en líquidos. El solvente determina el estado físico de la solución. Al decir mezcla
homogénea queremos indicar que las soluciones tienen las mismas propiedades físicas y
químicas en todas sus partes.
Un ejemplo claro que ilustra los conceptos anteriores es el de disolver azúcar en agua
Las moléculas de azúcar dejan la estructura cristalina del sólido y se dispersan
uniformemente en el agua produciendo así una mezcla molecular completa de las dos
sustancias, en la que el azúcar es el soluto y el agua es el solvente.