Japón se decidió a la economía de mercado combinada con intenvencionismo, o el apoyo del estado para los proyectos de inversión como la construcción de carreteras, vías férreas y la investigación. En Japón se dedicó 3% del PIB al desarrollo de investigaciones, lo que le dio uno de los primeros lugares en el mundo en este sentido. Con el crecimiento fenomenal en 1967 se ha convertido en la segunda potencia económica del mundo.