Respuesta :
El mito de los hongos de “la Esperanza”
El Ecuador de los años 70´s y 80´ se dio a conocer no por sus logros deportivos, ni por meritos extra culturales, peor aún por su política y sus gobernantes.
Esto por muy bajo llamaba la atención de la prensa y más aun del turismo, ya que este siempre se baso en la Amazonia y en las Islas Galápagos, pilares fundamentales del turismo en este país. Siendo ese el punto más álgido de concentración de turismo en las décadas citadas hasta la presente.
Pues ese lo fue oficialmente, ya que cuenta el mito que para estas épocas, la era hippie estaba en su apogeo, y quienes se dedicaron a recorrer el mundo con su mochila en mano, no perdieron la pista de pasar por Ecuador, que sin mucho que ofrecerles, basándonos obviamente en el tipo de turismo que esta generación buscaba, encontró algo muy particular y que a ellos les venía excelente.
Bien dice la leyenda que al sureste de la provincia de Ibarra, encontramos el cantón “La Esperanza”.
El mismo que aparte de albergar una lindo paisaje, tiene algo que muchos, incluso hasta el día de hoy, ansían en las grandes urbes y en las más desarrolladas culturas, pues no es nada más que la puerta de escape a todos sus problemas y frustraciones, en muchos de los casos solo a la curiosidad, en otros una puerta a un viaje para encontrarse consigo mismos, o tal vez en busca de algo que en su vida han imaginado.
Hablamos de los famosos hongos de “La Esperanza”, y no es que estén llenos de ella, sino más bien va ligado a su lugar natal.
Pues es tan poderosa la propiedad principal de estos maravillosos hongos que tan pronto se corrió la voz de su descubrimiento, al instante empezaban a llegar visitantes de diferentes partes del mundo. Todos con una misma consigna, que era probarlos, y ver que tan poderosos eran.